Suéltalo

No te diste ni cuenta cuando su noche devoro tu día, no puedes moverte y no sabes si estas en medio de la nada o en algún lugar de tu mente, él es tu pequeña llama que alumbra tu oscuridad, él esta acabado y si no lo sueltas te quemara las manos, acéptalo amiga el ultimo rasgo de “amor” se fue la noche de ayer con la ultima gota de fluido seminal, acéptalo eres la amante, la otra, la segundona, un vulgar descansadero, no digo que sea malo, es sólo triste y tedioso, sólo suéltalo.

Querida amiga, realmente esto debía pasar, no era un secreto que nunca dejaría a su esposa y a su hijo, realmente esta vez te sobreestimaste al creer podrías ganar este idiota juego, el sexo con pétalos de rosas en la cama, las salidas de fin de semana y toda esa puta porquería cursi que él te da como sustituto de la realidad, las sutilezas que no entiendes pero hacen que se la mames como si se te fuera el alma en ello.

Mis palabras no son las más dulces para reconfortar una alma dolida y confundida como la tuya, incluso soy pésimo, ya me canse de discutir contigo sobre las bofetadas que te dio jugando (según tú), aunque él pida disculpas y con ojos llorosos te diga que fue un lamentable accidente, créelo algún día terminaras en un juzgado contando esta entretenida historia con la sangre recién coagulada y dos dientes menos.

Ya no hagas drama y deja de aburrirme, esas pendejadas las viví en la secundaria, tu eres más vieja, pero yo viví más rápido, pero vamos querida… ¿A quien engallamos? Ambos sabemos regresaras porque eres solitaria, regresaras porque abandonar requiere de energía y tu eres perezosa, y sobretodo regresaras porque sabes que no eres mejor que él.